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Detrás del silencio. La música en la cultura Nasca
Detrás del silencio. La música en la cultura Nasca
Anna Gruszczynska-Ziółkowska, (aut.); Francisco Villaverde, (trad.)
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La cultura Nasca, cuyo ocaso empieza a inicios del siglo V d.C. con una serie de acontecimientos dramáticos, se nos revela a través del registro arqueológico, ya que, lastimosamente, no existen fuentes etnohistóricas que le pudiesen ser asociadas de manera directa e inequívoca. Sin embargo, la visión que se nos presenta a través de este conjunto algo limitado de evidencias, es la de un sistema socio-cultural orientado principalmente a las actividades de carácter mágico-religioso. En apoyo a esta última constatación y sin negar la importancia del componente económico-productivo, basta solo comparar la inversión de trabajo humano en la construcción del conjunto ceremonial de Cahuachi o de los famosos geoglifos, la que fue necesaria para erigir y mantener el sistema de irrigación para fines principalmente agropecuarios, asociado – entre [...]otros – a los famosos puquios. Parece entonces evidente, que fue una ideología basada en un paradigma animista, la que determinó y orientó la principal parte de las actividades de la sociedad nasquense, entre otras, las de carácter musical. Los instrumentos músicales almacenan una energía que, una vez soltada, permite influir en la realidad observada y, a la vez, conocerla. Es esta una energía illimitada, eterna, una fuerza que se manifiesta a través de una vibración particular: el sonido. Su manifestación, y orientación deliberamente y sabiamente programadas, constituían un acto ritual de particular importancia. El presente estudio es un intento de considerar la cultura Nasca desde el punto de vista de su música. Esto implica en primer lugar una breve introducción al mundo nasca (Primera Parte) así como la presentación más detallada del conjunto de instrumentos producidos por los nasquenses, cuya característica más sobresaliente es el material empleado: la cerámica (Segunda Parte).
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